Llegaron las nauseas. Pensé que iba a ser una de las afortunadas en librarse pero el domingo hicieron su aparición estelar. No he llegado a vomitar lo cual está muy bien, pero he estado muy incómoda. La sensación para aquellas que no lo han sufrido es como estar mareada por viajar en coche. En mi caso me he encontrado durante todo el día como mareadilla pero completamente soportable y en dos momentos (normalmente por la tarde) me he encontrado francamente mal (me recordaba a los cinco segundos previos a vomitar: esa sensación en la que te evades del mundo, la respiración se acelera, salivas más.... Muy desagradable).
Ahora, he conseguido controlarlas procurando tener el estomago siempre con algo de comida. Noto mucho la diferencia. No estoy para tirar cohetes pero tampoco para el arrastre.
Lo de tener algo de comida en el estómago lo he comprobado a partir de hacer la visita a la matrona quien me indicó la necesidad de comer cinco veces al día y beber mucho líquido (unos 8 vasos de agua al día). La verdad que al empezar a poner esto en práctica he notado como me aliviaba mucho la sensación de mareo asi que estoy muy contenta. Obviamente mi caso no era extremo asi que con esta simple rutina he mejorado considerablemente.
Por otro otro lado hemos hecho nuestra primera visita a la sección premama. He comprado un par de sujetadores, leggins y medias. Las medias si ya tendian a enrrollarse cuando engordaba un poco, ahora dificilmente las mantenía en su sitio más de media hora lo cual hacía que estuviese todo el rato recolocándome las medias, la blusa y la falda que era bastante incómodo y muy poco femenino.
Los leggins me los he comprado de cara a un poco más adelante porque ya que estaba sabía que era un básico que me iba a venir muy bien incluso para poner debajo de los pantalones en ese periodo en el que no te los terminas de atar y los tapas con una blusa pero aun así sientes que estás enseñando tu ropa interior a todo el mundo.
Por lo demás estoy perfecta... eso sí... casi 4 kilos he engordado! me ha dicho la matrona que las primeras semanas es muy normal pero sin dejar de comer he optado por dejar de un lado la comida grasienta que me apetece y comer más fruta, ensaladas... para quitar este hambre.
Durante varios días lo único que he notado ha sido el dolor en el pecho, algo de sueño, mucho hambre y pinchazos en el vientre.
El cuerpo va adaptándose a la nueva realidad y este fin de semana he descubierto que he perdido la capacidad de meter tripa. A simple vista no he engordado y no se nota nada pero no puedo meter la tripa para dentro. Al palpar el vientre noto que está duro y que no está blandito y moldeable como antes. Debido a eso ya he tenido que guardar dos pantalones de cintura alta y prietitos con los que sentarme es una verdadera tortura. Con los pantalones normales no tengo ningún problema e incluso alguno se me cae. Curioso. Seguramente si no hubiese sido por mis pantalones de cintura alta no hubiese caído en la cuenta de esto.
Si durante los primeros días he notado algo de sueño, ahora lo que siento es tal desesperación por dormir que me dan ganas de llorar y acurrucarme en un rincon de mi trabajo. En serio, es como si llevase sin dormir varios días.
Por otro lado el hambre no se si lo tengo más controlado o simplemente me he acostumbrado a él. En cualquier caso lo llevo mucho mejor. Eso sí, tengo ganas de comer picante... todo picante!!!
Por lo demás... A la espera de poder ver en la ecografía lo que mi cuerpo ya nota. Este fin de semana se ampliará un poco más el círculo de los conocedores de "el secreto". Esperemos que reaccionen bien!
Me despido muy contenta con lo mío y esperando una confirmación de positivo (que yo ya sé que es un positivazo) de alguna lectora que yo me sé...
Durante el pasado mes una amiga me regaló varios test de ovulación que le sobraron cuando buscó su embarazo. Le pasó como a mi, que convencida de que no había acertado, fue a la farmacia y se compró un paquete de 10. Pensé en esperar al siguiente mes ya que me había propuesto hacerlo "a lo natural" pero era tan jugoso tenerlos ahí... que no me pude resistir.
La verdad es que a mi no me funcionaron como esperaba y por eso había decidido no hablar sobre ello ya que poco podía aportar.
Pero meditándolo mejor, la verdad es que cualquier experiencia es buena.
Me los hice durante los días que en teoría tenía que ovular a eso de las 12 de la mañana y esto es lo que obtuve:
Como véis el día 10 es el que está bastante más marcado asi que supongo que o bien el 10 a otra hora o bien el 9 a última hora me habría salido el positivo. El tema es que aunque lo parezca a mi no me salió un positivo ya que la línea tiene que salir igual o más oscura que la de control por lo que nada de nada.
De hecho se supone que cuando te sale es cuando hay que ponerse manos a la obra porque significa que en 24-48 horas ovularás... y yo no le hice ni caso. Ni margarita ni nada. Nos dejamos llevar y esa semana en concreto pues sí que intentamos sacar tiempo para nosotros pero cuando salió el positivo no hicimos nada especial.
Teniendo en cuenta que los espermatozoides pueden durar hasta 5 días vivos dentro en tu época fertil y dados los resultados, está claro que hicimos diana.
Respecto a los test de ovulación:
Inconvenientes: Me sigue sin convencer lo de "preparados, listos, YA!" para temas de amor... pero apurado te veas! Tengo clarísimo que si hubiese tardado un poco más hubiese sido la primera en obsesionarme y buscar métodos para hacer diana, de hecho tengo unos cuantos test que me he comprado ya estando embarazada y sin saberlo.
Convenientes: Tienes la tranquilidad de que todo va bien y has ovulado y además tienes la oportunidad de no dejar pasar ese día. Si tienes un problema y no ovulas es una forma de darte cuenta (aunque conozco casos de chicas que pese a ovular, su pico de hormona es tan breve que nunca pillan el positivo con este tipo de test).
Con un poco más de tranquilidad os cuento la experiencia.
Como ya escribí llevaba una semana con síntomas pero después de mi experiencia del mes anterior y teniendo en cuenta de que en comparación tenía muchos menos les hice caso omiso. Estaba convencidísima de que me bajaría de un momento a otro aunque mi parte irracional no hacía más que pensar que era posible que estuviese embarazada.
Total que el viernes no aguanté más y a un día de la falta me hice un test (sí, lo sé, no esperé al sábado como prometí pero es que ya me notaba yo rara rara). Al principio blanco impoluto por lo que me hice a la idea del negativo ya que según había leído los positivos salen muy rápido y no hay que esperar a los 5 minutos que señala en el prospecto para ver el resultado. En mi caso no fue así. En los dos primeros minutos no aparecía nada por lo que fui a cambiarme de calzado ya que el test era lo primero que había hecho al llegar a casa. Cuando al minuto y medio volví al baño vi esto:
Como podéis ver se intuye una sombra rosa donde debería aparecer el positivo. El test es de alta sensibilidad y lo compré en la tienda womantest de la que ya os hablé junto con varios test de ovulación. Había leido mucho sobre los test y la línea de evaporación y al ver esa rayita tan fina supuse que era eso lo que había aparecido. No obstante, busque en google como diferenciar un positivo de la línea de evaporación.
Total, que lo que saqué en claro es que la línea de evaporación aparece a los 10 minutos y es de color grisáceo y que la línea del positivo es rosa y aparece cuando pone el prospecto (antes de los 5 min).
Yo aunque leve lo veía claramente rosa y tenía muy claro que no habían pasado 10 minutos antes de que apareciese por lo que me bajé a la farmacia hecha un manojo de nervios al comprarme un "ClearBlue".
Y en ese estado me encontró mi marido. Con el ClearBlue en la mano esperando a que pasase un rato para que tener suficiente concentración en la orina de la hormona que detecta y sin saber qué pensar.
Cuando habían pasado dos horas desde la anterior prueba me hice finalmente el nuevo test de embarazo y ante los ojos estupefactos de los que si todo va bien serán padres primerizos, apareció esto:
Como ya os comenté en el anterior post tan sólo se lo vamos a decir a los más más íntimos aunque me estoy ya dando cuenta, y sólo han pasado 3 días, de lo complicado que es guardar y que te guarden semejante secreto.
Hoy he llamado para pedir cita al médico y el viernes me atenderá para darme ya cita con la matrona y para análisis (creo).
Estoy embarazada. Tras 4 pruebas de embarazo (no me lo podía creer) hay confirmación! Hemos llorado, reido... De momento va a ser secreto salvo para la familia mas cercana (padres, hermanos y abuelos). No tengo mucho tiempo para escribir pero quería daros la noticia!
Cada vez estoy más cerca de que me baje el periodo y nuevamente vuelvo a tener síntomas. Si bien, he de decir, que esta vez me lo estoy tomando con muuuucha más calma y al menos a mi marido no le tengo informado de cada síntoma que tengo y que podría significar embarazo.
Para empezar tengo muchos menos. Me han salido 3 granos en la cara (tipo rabioso de estos que te salen con la regla), me duelen los pechos, me despierto sudada y tengo pinchazos en el bajo vientre.
A parte de eso nada salvo que hoy me he levantado con un poco mareada pero bien puede ser que es lunes unido a que tengo la tensión baja ya que son los típicos mareos que me han dado alguna vez por una bajada de tensión.
El sábado se supone que me debe bajar la regla asi que si no me ha bajado me haré un test. Me gustaría decir que tendré paciencia y que esperaré al lunes pero soy realista y sé que no podré aguantar. Eso sí, esta vez no voy a hacerme el test hasta ese día. Nada de hacerlo cuatro días antes y arriesgarme a falsos negativos.
Por lo demás toca esperar...
Por otro lado, en mi día a día me doy cuenta de las dificultades que tienen las mujeres embarazadas en compatibilizar su vida laboral con su maternidad. Veíamos esta semana en el Congreso a una diputada de "Podemos" llevar a su bebé. Sin entrar a valorar el gesto sí es cierto que es algo que el común de las mortales no podemos hacer.
Pero es que no es sólo eso. El hecho es que yo, en mi búsqueda de un bebé sigo haciendo mi vida normal y he visto varias ofertas de empleo bastante interesantes pero... ¿Cómo me voy a cambiar de trabajo estando embarazada? Es posible que la nueva empresa no me ponga ningún inconveniente pero desde luego no es plato de buen gusto para un empresario emplear un trabajador que próximamente tendrá una baja de mínimo cuatro meses.
Asi que lo tengo todo en stand-by, sin moverme, quizás esperando a tener el bebé pasar la baja y mirar con más tranquilidad otro empleo que me llene más. Porque además de ser madre quiero ser profesional.
Desde que somos pequeñas muchas tenemos claro cuántos niños queremos, de que sexo tienen que ser y cómo les llamaremos. Pese a que eso va cambiando con la edad y normalmente deja de tener tanta importancia, hay mujeres que se llevan grandes disgustos si el sexo del bebe no coincide con sus expectativas.
Dado que esta situación se repite desde la antigüedad y en muchas culturas dan mucha importancia a esto, ha sido inevitable que aparezcan teorías y tácticas para poder elegir qué queremos tener. No me refiero por tanto a aquellas técnicas de adivinación una vez concebido (mirar por ejemplo la forma de la barriga para saber que se espera) si no a una auténtica programación preconceptiva para escoger si pintaremos la habitación de rosa o azúl.
Yo, en mis investigaciones prenatales me he encontrado con tres, más por casualidad que por verdadera preocupación en ese aspecto (como se suele decir: Que venga y que venga sano), aunque estoy segura de que habrán muchos más:
Tabla china
Este método es muy sencillo. Simplemente debes buscar en la tabla que adjunto a continuación, el mes de concepción y la edad de la madre en ese momento.
Ejemplo: María, 28 años. Está buscando el bebé y lo conseguirá el próximo febrero. Según la tabla lo que María tendrá será una niña.
Poca ciencia tiene este método ya que según el mismo yo debería haber sido un hombrecito pero como entretenimiento no está mal.
El calendario lunar
Para mi, el hecho de que la luna influyese en los partos no ha sido algo novedoso, pero sí lo ha sido el hecho de que ésta influya también en el sexo del bebé.
Supuestamente, si la ovulación y por tanto concepción se produce en luna llena hay más probabilidades de concebir una niña, mientras que si se produce en luna nueva habrá más de concebir un niño.
Si por otro lado se da en luna creciente (la luna tiene forma de "D"), las posibilidades mayoritarias serán de concebir una niña y en luna decreciente (luna con forma de "C") serán de niño. No obstante, en estos dos últimos casos parece ser que no incide y no es tan fiable.
Lo único que se me ocurre para dar credibilidad a este método es que dado que la luna influye en los mares, en la menstruación, en los partos, puede influir también en la propia concepción ayudando a determinados espermatozoides a llegar a la meta por su distinta fisonomía que explico a continuación.
Programación de las relaciones en función de la fecha de la ovulación
Para mi de los tres es el que más base científica tiene (o por lo menos el que más da el pego).
Como muchas sabréis, el sexo del bebe está determinado por el espermatozoide que fecunda el óvulo. Hay espermatozoides con el cromosoma X y espermatozoides con el cromosoma Y.
El óvulo siempre tiene cromosoma X.
Para que sea niño necesitamos un cromosoma X y un cromosoma Y.
Para que sea una niña necesitamos dos cromosomas X.
Lo que explica este método es que los espermatozoides tienen distinta fisonomía según sean del tipo X o Y. Mientras que los cromosomas del tipo Y son más rápidos los cromosomas del tipo X son más resistentes por lo que las instrucciones para elegir el sexo serían las siguientes y siempre teniendo claro que para esto, a parte de suerte, habría que tener nuestros día de ovulación controlado:
Para tener una niña: Se deberá hacer el amor con más antelación a la ovulación (teniendo en cuenta que para que haya fecundación tienen que seguir habiendo espermatozoides, que duran tres días, en el utero cuando el óvulo salga). De esta forma conseguiremos que los espermatozoides que lleguen al ovulo sean los más resistentes puesto que los demás ya habrán perecido por el camino.
Para tener un niño: Se deberá hacer el amor en el día de la ovulación para favorecer a los espermatozoides del tipo Y, los más rápidos, ya que en este caso la resistencia no tendrá ninguna valía por haberse fecundado o deshechado ya el ovulo cuando éstos quisieran llegar.
Incluso con éste último método y confiando en que lo que he leido sobre la anatomía de los espermatozoides sea cierto lo único que podríamos llegar a hacer es dar cierta ventaja a los espermatozoides de un tipo u otro pero necesitaríamos un alto porcentaje de suerte para acertar y que nuestras manipulaciones tuviesen sus frutos.
Salvo casos extremos donde tras cuatro niñas se quiere el varón o viceversa , creo que todas las madres cuando van a tener un hijo o cuando van a por él como es mi caso, lo único que quieren es que venga y que salga todo bien.
Os dejo un video relacionado con el tema, que me hace mucha gracia y que me recuerda a mi niñez:
Un saludo y ánimo con esa vuelta a la rutina para las que, como yo, estábais de vacaciones.